La preocupación por el medioambiente nace de gran parte de los consumidores que buscan empresas comprometidas con los mismos valores. La innovación de muchas marcas pasa por incorporarse a esta cultura eco-friendly que se adecua a las exigencias de los clientes sin desmerecer un ápice la calidad del producto ofertado. Más bien, al dar un paso en este compromiso, se sienten obligados a elevar la propuesta.
La marca de yogures Miraflores está embarcada en esta cruzada por actuar de manera más responsable con el medioambiente y encara los cambios necesarios para ello. Con la renovación de su empaque, da un paso más en esta implementación. El envase de cartón, el más tradicional y reconocido de la marca Miraflores, se ha potenciado con un nuevo layout que presenta una apariencia y funcionalidad mejoradas. La innovación aporta nuevas líneas de plegado que facilita su vaciado, doblado y desecho posterior.
Estos cambios repercuten en la optimización del reciclado al ocupar un menor volumen de manera fácil y práctica. Miraflores mantiene la premisa de tener 85% menos de plástico que una botella PET.
El empaque resalta de mejor manera su característica Eco-Friendly. Agrega también una mayor asociación emocional con el consumidor. Las opciones saludables que el cliente busca en el producto, se extienden también a un empaque de menor impacto con el medio ambiente.
Para Miraflores, este relanzamiento respalda una coyuntura global que ha generado la escasez de materias primas como el papel y cartón. La carencia de estos materiales desfasó en varias oportunidades los cronogramas de lanzamiento y por ende generó que convivan las dos presentaciones, actual y antigua, al mismo tiempo en los PDV. La empresa trabaja de manera ardua por contar con una correcta visibilidad en el PDV de los productos a la vez que se atiende aspectos propios del producto como la refrigeración. El nuevo layout presenta una aleta superior impresa y el frente liso, destacando un producto de altura y con una apariencia de modernidad.
La empresa ecuatoriana Alimec S.A. comenzó en 1978 con la producción y comercialización de especias, condimentos, salsas y aderezos. Para ello, contaban con la licencia para trabajar la mundialmente reconocida McCormick.
A partir de 1999, comienza un proceso de fusión por el cual Alimec S.A. absorbe a tres empresas: Sociedad Industrial Hertob C.A., Empresa de Lácteos Miraflores Emlacmi y a Zanzi S.A. Estas incorporaciones amplían el portafolio de productos y permite ingresar a nuevas categorías de productos disponibles para el consumo masivo.
La dinámica comercial envuelve a las marcas en un proceso permanente de adecuación al mercado. Los procesos de transformación centran su labor en la relevancia que estos cambios representan para el consumidor final, no solo desde el punto de vista comunicacional, sino que también mejorando atributos diferenciadores de los mismos a las nuevas tendencias de consumo e innovando de manera constante.